https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/education/
Muchos de vosotros habréis oído, últimamente, el término ODS en los medios de comunicación. No es un término sencillo de entender: OBJETIVOS PARA EL DESARROLLO SOSTENIBLE. En el año 2015, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) aprobó la Agenda 2030 sobre el Desarrollo Sostenible. El objetivo es dar“una oportunidad para que los países y sus sociedades emprendan un nuevo camino con el que mejorar la vida de todos, sin dejar a nadie atrás”. La Agenda de la ONU cuenta con 17 ODS, que abarcan desde la eliminación de la pobreza hasta el combate al cambio climático, la educación, la igualdad de la mujer, la mejora de la educación, la defensa del medio ambiente o el diseño de nuestras ciudades.
Una primera impresión, al buscar su significado, es si realmente existe una voluntad, por parte de las instituciones, de perseguir un desarrollo sostenible y global para todos. Exista o no esa intención, creemos que es un error cruzarnos de brazos y esperar a que los gobiernos cumplan con los ODS. Se trata de una responsabilidad y una obligación de todos, aportar un granito de arena para hacer montaña. Entre todos sumamos, juntos mucho mejor.
Por eso, desde SOGOLO queremos aportar nuestra visión:
La primera idea es que es posible, que cumplir con los ODS es posible, y ¡es de justicia!.Por nacer en un lugar del mundo económicamente viable, no podemos dejar de ser corresponsables de la pobreza y miseria en la que viven otras personas. Nadie elige nacer en un continente o en un país concreto.
La segunda idea es que nuestro ODS de referencia está en el ADN de SOGOLO, en su eslogan: EDUCACIÓN PARA CONSTRUIR UN FUTURO. Se trata del ODS Nº4: EDUCACIÓN DE CALIDAD. Y se desarrolla con la siguiente frase: “Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos”. Y ¿por qué la educación? Porque según la ONU “la educación permite la movilidad socioeconómica ascendente y es clave para salir de la pobreza”. Se ha avanzado mucho en los últimos años, ampliando el acceso a la educación y las tasas de matriculación en las escuelas en todos los niveles, especialmente para las niñas. Pero aún queda mucho por hacer…
Según datos de la ONU,en el año 2018, “alrededor de 260 millones de niños aún estaban fuera de la escuela”y “más de la mitad de todos los niños y adolescentes de todo el mundo no están alcanzando los estándares mínimos de competencia en lectura y matemáticas”. Con la pandemia de la COVID-19 el problema de la educación se ha multiplicado exponencialmente, ya que el cierre temporal de las escuelas “afectó a más del 91 % de los estudiantes en todo el mundo. En abril de 2020, cerca de 1600 millones de niños y jóvenes estaban fuera de la escuela. Igualmente, cerca de 369 millones de niños que dependen de los comedores escolares tuvieron que buscar otras fuentes de nutrición diaria”. Y se insiste en el drama de muchos niños señalándose que “nunca antes habían estado tantos niños fuera de la escuela al mismo tiempo, lo que altera su aprendizaje y cambia drásticamente sus vidas, especialmente las de los niños más vulnerables y marginados. La pandemia mundial tiene graves consecuencias que pueden poner en peligro los avances que tanto costaron conseguir a la hora de mejorar la educación a nivel mundial.”
Desde SOGOLO queremos apostar el 100% de nuestra energía, nuestra ilusión y nuestros recursos para que los niños y las niñas del Valle del Luangwa en Zambia tengan un SOGOLO mejor, siendo la educación el motor de ese futuro. Entre todos podemos ayudar a formar a formadores con materiales en inglés, a donar ordenadores antiguos, mandar cuadernos y bolígrafos, aportar dinero a los proyectos abiertos…. Tenemos un nuevo proyecto en ihelp.
https://www.ihelp.org.es/en/node/2231
No te olvides que puedes desgravarte fiscalmente por las aportaciones que realices.
¿Nos ayudas a conseguir el ODS número 4 en Zambia?